El sedentarismo, la mala alimentación o bajar de peso de manera rápida puede causar flacidez en algunas partes de nuestro cuerpo como brazos, muslos o pecho. Este problema puede solucionarse si se establece un procedimiento adecuado y se realiza de manera continuada sobre la zona afectada.
La pérdida de elastina y colágeno hace que la elasticidad de la piel no sea la misma. La disminución de estas dos proteínas se acrecienta con el paso de los años, por ello es necesario combatirla desde edades tempranas. Además, otros factores como los comentados anteriormente pueden hacer todavía más evidente este problema.
La flacidez puede presentarse en varias zonas y en distintos grados, por ello debe tratarse de manera personalizada. En TAMINA nuestro equipo profesional determina a partir de un análisis individualizado cual es el tratamiento óptimo para la afección presentada.